Lo de Zoido, y el Pleno.

He estado esta mañana en el desayuno informativo que ha tenido como protagonista a Juan Ignacio Zoido, Alcalde de Sevilla y Presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias. Me quedo con una impresión esencial: con él, los ayuntamientos han dejado atrás el discurso victimista, y en cambio se sienten partícipes de la política de Estado que hoy día constituye la austeridad presupuestaria. Atrás quedó aquel discurso de "la asignatura pendiente de la democracia" o "necesitamos más recursos porque somos los más cercanos a los ciudadanos". Por el contrario, ahora se habla de eficiencia, rigor en lo que se hace y aplicación de mayores controles. Ese es Zoido, y ese es un paso esencial para reconstruir nuestra maltrecha estructura institucional.

El Pleno de la próxima semana será peculiar. El miércoles comparecerá el Presidente del Gobierno para dar cuenta de la reunión del Consejo Europeo de ayer. Será a las 9 de la mañana, y será la primera vez que actúe como tal, en tribuna parlamentaria, el nuevo líder del PSOE, Rubalcaba o Chacón. Estreno parlamentario... ¿para decir algo nuevo? Apuesto que no.

Al hilo de esto: por acertado criterio del Presidente del Congreso, en los debates en que intervenga el Presidente del Gobierno sí podrán participar todos los componentes del Grupo Mixto. En los que no, sólo serán tres los intervinientes. El Reglamento establece que deben ser dos, por lo que en ambos supuestos se actúa con franca generosidad.